El día que no hubo informales
Fuente: El Financiero (Opinión) Por Enrique Quintana Hagamos un ejercicio de imaginación. Supongamos que una mañana nos despertamos y nos damos cuenta de que los trabajadores informales han desaparecido y todos ellos se han convertido en empleados formales. No vería usted entonces ambulantes en los semáforos o taqueros y torteros en las banquetas. Tampoco los vendedores de chácharas y 'piratería' en múltiples plazas. Incluso, los tianguistas habrían cedido su lugar a mercados bien organizados, limpios y modernos. ¿Cuál sería el efecto que ese hecho podría tener en la economía mexicana? Hasta ayer, hubiera sido imposible responder a esta pregunta con cierta precisión. Hoy, gracias a la información que...
leer mas